
En un comunicado emitido por Nippon Steel Corp. en la mañana de este 4 de agosto, la empresa japonesa menciona que presentará una apelación inmediata contra una orden de un tribunal de distrito de Corea del Sur para confiscar los activos en poder de la compañía japonesa en este país.
De igual forma, menciona que el problema de los antiguos trabajadores de guerra de Corea del Sur se resolvió completa y finalmente en virtud de un pacto bilateral de 1965 sobre propiedad y reclamos, que es un acuerdo oficial entre Japón y Corea del Sur y que manejará el asunto de manera adecuada, con base en sobre negociaciones diplomáticas entre Tokio y Seúl.
La declaración se produjo después de que el servicio por publicación sobre documentos en la orden de embargo de activos entrara en vigencia el mismo día.
La orden de la corte de distrito se emitió después de que la Corte Suprema de Corea del Sur ordenó a Nippon Steel en 2018 que pagara una compensación a los surcoreanos requisados para trabajar para la compañía durante la Segunda Guerra Mundial.